Al mirar los productos que puede ofrecer el grupo industrial noruego Kongsberg, presente en la Exponaval 2014, se aprecia la misma excelencia que en la versión anterior de la feria en el 2012. Por ejemplo, el vehículo autónomo subacuático (AUV) Hugin que puede ser construido en diferentes tamaños, de acuerdo los requerimientos de las organizaciones interesadas en comprarlo. También destaca el NASAMS, el sistema de defensa antiaérea que fue encargado por Chile el 2010 al fabricante noruego y del cual ya la Fuerza Aérea chilena cuenta con dos batería activas desplegadas en las bases aéreas del norte del país, mientras que una tercera batería móvil de NASAMS apoya a una de las brigadas acorazadas del Ejército. También están los sonares de guerra antisubmarina ST2400 y SS2030 y el misil NSM (Naval Strike Missile) que fue protagonista en un ejercicio de hundimiento en el marco de las maniobras del RIMPAC 2014. Y no se puede olvidar al misil Penguin. Pero lo que más impresiona es la bella imagen de un rompehielos con un equipamiento capaz de “operaciones en el hielo más duro”. Esto justo en un momento en que la Armada de Chile necesita reemplazar su buque polar “Almirante Viel”, próximo a cumplir su vida útil, por una embarcación con capacidad para ir a la Antártica en cualquier época del año. “Estamos muy satisfechos con la organización de esta nueva versión de la Exponaval. Aquí podemos reunirnos con las personas que nos interesan, con las organizaciones, con las tres ramas de la defensa nacional de Chile y también con el mundo civil de Chile”, dice Kyrre Lohne, vicepresidente de comunicaciones estratégicas de Kongsberg.
